Comprobar la marcha de programas claves para el desarrollo equilibrado en la producción de alimentos, fue centro este jueves del recorrido del Comandante del Ejército Rebelde José Ramón Machado Ventura, en Mayarí.
En la planta Dos amigos, ubicada en Guaro y rectorada por el Grupo Empresarial de Producciones Biofarmacéuticas y Químicas, Labiofam, Machado Ventura se interesó en las posibilidades de esa industria para la producción de piensos utilizados en la crianza de peces e incentivó a la elaboración de productos demandados en la alimentación humana, tomando en cuenta la tecnología instalada allí.
Enfatizó en la urgencia de estabilizar la siembra de yuca, boniato y el llamado frijol chino, a partir de las proteínas que aporta al organismo y tomando en cuenta que países como La India y China, con altos niveles de población, cultivan a gran escala esa variedad de frijol.
La referida legumbre tiene un ciclo de siembra de 70 días, es muy resistente a la sequía, y está considerado como una rica fuente de vitamina A, B, C y E, contiene además muchos minerales, incluyendo hierro, calcio y potasio.
El Héroe de la República de Cuba enfatizó en la necesidad de consolidar y ampliar las plantaciones de árbol del Neem, en aras de aprovechar la instalación creada para el procesamiento de sus frutos, de los cuales derivan importantes recursos utilizados como insecticidas, repelentes y biocontroladores naturales.
Acompañado por las máximas autoridades políticas y gubernamentales de la provincia de Holguín y el municipio de Mayarí, el dirigente subrayó la importancia de encadenar producciones y buscar todas las alternativas posibles, ante las infinitas demandas.
Machado Ventura dijo que el pienso no se puede importar ante los altos precios del mercado internacional, pero hay que lograr peces, carnes de aves y cerdos con nuestros alimentos, y lo primero es la siembra.
Indicó que la industria pesquera tiene que aprovechar los desechos de las elaboraciones y procesarlos para producir pienso, el cual tendría alto contenido de calcio.
En áreas del Canal de Saetía, comprobó el programa de siembra y desarrollo de cocoteros, el cual necesita de mejores atenciones.
En esa localidad el ejército juvenil del trabajo labora en la creación de una nave donde alojarán cien reproductoras porcinas, construye una vaquería con capacidad para un centenar de animales y proyecta el fomento de 106 hectáreas de caña y forraje para apoyar el alimento animal.
El comandante del ejército Rebelde, refirió la necesidad de seguir ampliando las áreas cultivables, potenciar la siembra de frutales y compactar los procesos para lograr una comercialización sostenible en el futuro más cercano posible.